jueves, 10 de febrero de 2011

LA COMADRE TÉMPORA

ADECRA EN PLENO, CON CASI TODOS SUS REPRESENTANTES, ANDUVO PASEANDO Y DIFUNDIENDO LA OBRA EN LA PROVINCIA DE CORDOBA, ESPECIALMENTE EN COSQUÍN.


Allí nos encontramos con una de esas almas gemelas que suelen hallarse en los lugares más impensados, y que nos prueban que hay causalidad en todo lo que ocurre a nuestro alrededor y nada es casualidad.

Témpora es una de las docentes de cerámica más prominentes de la zona.
También construyó con su hijo una serie de departamentos que alquila en la temporada. Allí fuimos.
Su origen es la tribu diaguita de Belén de Catamarca.

Todo allí se hacía a lomo de mula; visitas, transportes, intercambio de mercadería, etc. Eran los tiempos en que los “wincas” se enriquecían con la sangre, el sudor y las lágrimas de nuestros hermanos de los pueblos originarios.
Los títulos de dominio se llamaban “hijuelas” y eran muy difíciles de conseguir. Había que ir de Culampajal a Corral Quemado y era toda una travesía.

Los mineros se “ corpachaban de vino morao” en el boliche de Marcelino Ríos, como canta la zamba de los mineros. Marcelino es un pariente de Témpora, hijo de un gringo rubio y de ojos celestes, que, como casi todos, nunca reconoció a los hijos que tuvo con una hermana aborigen, porque así eran-y así siguen siendo-las cosas por allá. Los grandes viñateros como él, eran dueños de la vida ajena.

Los familiares de Marcelino, se destacaron. Eulalia Ríos era maestra y fue intendenta. Eulogia y Nelda, luchadoras sociales.
Estaban cerca de la mina La Alumbrera, en la que los gringos extraían, oro y cuarzo, hierro y otros minerales, hace un siglo atrás.
Para “asustar” a los rebeldes, los de la mina creaban leyendas terroríficas sobre el lugar, con “la mujer desnuda”, “la mula ensillada”, el “toro astas de oro” Y “ el diablo en mula”.

El papá de la hermana Témpora, viajaba por todos esos lugares, con seis y hasta ocho compañeros, con los que compartían, penas, peligros y alegrías.
Comerciaban trigo, lana, maíz, carne salada y tejidos artesanales. Se llamaba don Justiniano Chaile. Tenía muchas vacas y cabras.

Su madre, Eusebia Delgado de Chaile (“la vieja de las queresas”) tenía muchísimo capital en Culampajal. Ella contaba como un ejército de mulas cargadas de lingotes de oro, bajaban de las sierras para ser despachadas a Europa, sin ningún beneficio para Argentina y los argentinos, sí con coimas para gobernadores e intendentes…

Los aborígenes eran despojados por la misma empresa, obligándolos a golpes a “donar” lo mejor de su ganado, ceder parte de sus tierras y después, látigo mediante, ir a realizar trabajo esclavo en las trojas. En las casas quedaban mujeres sufridas y valientes y muchachitos y niños que trabajaban como hombres mayores, para conservar “alguito” de lo mucho que les quitaban.

Aclara Témpora que “las trojas” eran casas de piedra, donde se almacenaba la lana, de la cual “ TAMBIÉN TENÍAN QUE HACER DONACION”, LOS ABORÍGENES Y CRIOLLOS.
El idioma oficial de aquellos pueblos, es el quechua. Los demás son dialectos derivados.
La peor época para los pobladores originarios, fue La Década Infame” (l930-l940).

El sistema moderno de apropiación pasa por la excusa de resguardar salares, hasta el otro lado de la Laguna Helada. Con el pretexto de “cuidarlos”, en nombre de organizaciones ambientales que encubren a las grandes empresas mineras, vuelven a querer “quedarse” con todo lo que vale en Catamarca, La Rioja y amplias regiones de Cuyo.

La estrategia, igual que antes, es enfrentar pobres contra pobres. Así se disfrazan de gauchos y roban a los aborígenes. Para algunas etnias, menos en contacto con los blancos, el criollo, el gaucho, es ladrón y asesino. Hasta ahí llega la perversidad de estos gringos malparidos.

Por si esto fuera poco, compran los ponchos y la sal por monedas, con intermediarios que luego la revenden a precios exhorbitantes a los turistas. EL NEGOCIO ES REDONDO Y MUY PRODUCTIVO. ALGUNOS MILES DE DÓLARES VAN A PARAR A LOS BOLSILLOS DE FUNCIONARIOS CORRUPTOS, PARA QUE HAGAN LA VISTA GORDA…

Témpora, viaja y está en contacto permanente con sus hermanos.
Somos comadres con ella y compadres con su hijo, no por un vínculo religioso, sino porque los peleadores idealistas, nos encontramos y nos reconocemos en cualquier parte. GRACIAS, TÉMPORA. GRACIAS POR TODAS LAS ATENCIONES RECIBIDAS EN SU HOGAR. POR LAS CARPAS FRESQUITAS DEL RÍO COSQUÍN, COMPARTIDAS CON UN VINITO. GRACIAS POR LOS RELATOS, POR LAS COMODIDADES QUE NOS BRINDÓ GENEROSAMENTE. GRACIAS POR EXISTIR.

GRACIAS POR CONFIRMARNOS QUE ESTÁN DISPUESTOS A RESISTIR LA INVASIÓN DE LOS GRINGOS, FAVORECIDA POR ARGENTINOS CIPAYOS Y ALCAHUETES.
En Purmamarca, Chilecito y Culampajal, viven los hijos de aquellas etnias que fueron asesinadas, violadas y maltratadas por los blancos.

VAN A TENER QUE PASAR POR MUCHOS CADÁVERES, PARA REPETIR “LAS HAZAÑAS” DE UN SIGLO ATRÁS.
SUS MUJERES, SUS HOMBRES Y SUS JÓVENES LO VAN A IMPEDIR, CUESTE LO QUE CUESTE, PORQUE TIENEN ALGO QUE LOS GRINGOS NO ENTIENDEN: SON UN PUEBLO DIGNO, VALIENTE Y ORGULLOSO. NO SON PIRATAS INGLESES, AUSTRALIANOS, NI CANADIENSES.

SON ARGENTINOS, CARAJO…



ADECRA NACIONAL.